Es normal que te pregunten, pero también es importante que aprendan a respetar tu intimidad. Puede que te pregunten tanto porque te hayan pillado en alguna mentira, porque se preocupen por ti o porque les hayas demostrado que todavía no eres responsable: llegando a casa borracha o borracho, no cumpliendo con la hora de llegada, saliendo con gente poco fiable...
Habla o signa con ellos: diles que entiendes que se preocupen pero que quieres demostrarles que eres responsable, mayor y que te gustaría que respetasen tu intimidad.
Es importante que se lo digas. Seguramente tu familia no se da cuenta de la importancia de esos detalles así que díselo: incluirte en las conversaciones, no hacerte un resumen de lo que dicen sino contarte lo que van diciendo, respetar los turnos de palabra..
En realidad son pequeños detalles que pueden cambiar y que a ti te van a hacer sentir mucho mejor.
Lo mejor es que hables o signes con ellos. Puedes darles información para que estén más tranquilos, por ejemplo, diles dónde irías, con quién, cómo se podrían comunicar contigo si lo necesitasen, etc.
veces les da miedo porque desconocen que hay muchos recursos para las personas sordas. Demuéstrales que eres responsable y dales motivos para que confíen en ti.
Decir a tus padres que te gustaría que aprendiesen lengua de signos es una gran idea: significa que quieres que vuestra comunicación sea mejor y que tienes ganas de que aprendan para poder compartir más cosas juntos.
Si les pides que aprendan lengua de signos se estarán dando cuenta de que les faltan recursos para entenderos y puede que intenten mejorarlo: apuntándose en cursos de lengua de signos, interesándose por este idioma, etc.
Compartir ciertos temas con tus padres puede que te dé vergüenza o te resulte difícil contárselo. Es normal, pero no tienes que avergonzarte de nada
Tú eres quien decide lo que quieres compartir con ellos. Piensa en lo que puede pasar si se lo cuentas (que lo acepten, que te apoyen…) y valora si te vas a quedar más a gusto diciéndoselo o no. Seguro que tomas la decisión correcta.
Elige un buen momento para hablar o signar con ellos del tema: sin prisas y cuando estés tranquilo o tranquila. Piensa bien lo que les quieres pedir, por qué te tienen que dejar llegar más tarde y a qué te comprometes.
Por ejemplo si te dicen a una hora y tú quieres a otra siéntate con tus padres e intenta llegar a un horario intermedio que os parezca bien a las dos partes. Lo mejor es que negocies con ellos de forma tranquila y que cumplas el trato: recuerda que si lo cumples estarás demostrando que eres adulto o adulta y que pueden fiarse de ti.
Si es algo que te molesta háblalo con él o ella y díselo de forma tranquila. Hazle pensar: es verdad que si signáis por la calle la gente os puede mirar y puede que le dé vergüenza pero también signando os entendéis, es más divertido ir signando que callados… ¡y puede ser vuestro idioma secreto porque es difícil que os entiendan! Lo importante es que os entendáis, no lo que piense la gente.
En estas edades puede que te apetezca estar más con tus amigos y amigas o incluso solo o sola en tu cuarto que con tus padres. Las amistades, la soledad o los compañeros y compañeras de clase son importantes pero también lo es estar con la familia, porque te dan tranquilidad, amor, seguridad etc.
Reserva algún rato a la semana para estar con ellos y recuérdales que les quieres aunque paséis menos tiempo juntos.
Entenderte no significa que te dejen hacer lo que tú quieras. Seguramente ellos te escuchan pero puede que en algunas cosas no estén de acuerdo con lo que tú les dices o les pides.
Si lo que pasa es que no os entendéis porque no saben lengua de signos, porque no saben cómo comunicarse contigo… en ese caso díselo y pídeles que se informen en asociaciones, en el instituto, etc. seguro que valoran mucho que quieras que vuestra comunicación mejore y quizás no se habían dado cuenta.
Pacta con tus padres un “tiempo de redes sociales”. Las redes sociales son buenos recursos para estar en contacto con tus amigos y amigas pero no te olvides de salir con ellos y ellas, verles, signar o hablar...
Pacta con tus padres un “tiempo de redes sociales”. Las redes sociales son buenos recursos para estar en contacto con tus amigos y amigas pero no te olvides de salir con ellos y ellas, verles, signar o hablar…
Puede que todavía no te vean como un adulto y que por ser sordo no estás preparada o preparado para este tipo de cosas. Demuéstrales que puedes hacerlo solo y luego consúltale las dudas que tengas.
Igual que a tus padres siempre les verás como padres, a tu familia le pasa lo mismo contigo. Pero tú puedes demostrarles que ya eres mayor diciéndoselo y demostrándoselo día a día: en tus estudios, cuidando de tus cosas y de tu habitación, cumpliendo los tratos a los que llegues con ellos, etc.
Es normal que te enfades... pero enfadándote no conseguirás mucho. Habla con ellos y pídeles que confíen más en ti. Pregúntales qué situaciones les dan miedo y explícales tu punto de vista. Enséñales todos los recursos que hay para suprimir las barreras de comunicación y demuestra lo responsable que eres.
Ganar independencia y que tus padres confíen en ti no se consigue rápidamente ni enfadándose. Poco a poco lo irás consiguiendo. ¡Paciencia!
Tu familia quiere lo mejor para ti y por eso se preocupan... pero tú decides. ¡Seguro que sabes tomar buenas decisiones!
Hasta ahora te has sabido comunicar con tus padres, ¡seguro que ahora puedes seguir haciéndolo!.
En algunos países existen otros tipos de familias, se permite que los hombres se casen con varias mujeres. Ziona Chana de 66 años vive en el norte de India con sus 39 mujeres, 94 hijos y 33 nietos.
En algunos países se permite la unión de parejas formadas por personas del mismo sexo y pueden ser padres y madres.
El Día Internacional de la Familia se celebra el 15 de mayo.
Es mentira porque... Tu familia no sabe lo que quieres, lo que piensas, lo que te preocupa… si tú no se lo cuentas.
Es mentira porque... A la mayoría de adolescentes les cuesta hablar o signar con sus padres. Pero recuerda que ellos están a tu lado y seguro que están deseando saber cómo estás.
Es mentira porque... Puede que tus padres no conozcan todos los recursos que hay a tu alcance para ser independiente. ¡Enséñaselos! Que los conozcan, que los prueben, que resuelvan contigo todas sus dudas, etc. Seguro que después se sienten más tranquilos.
Es mentira porque... Seguro que ellos quieren saber de ti pero puede que no sepan cómo empezar. Aprovecha los momentos tranquilos y sin prisas para contarles y preguntarles también ¿Qué tal en el trabajo? ¿Qué tal es tu jefe?... La comunicación es cosa de dos.